Querida Persona Desconocida, te quiero decir que hemos tenido un día feliz. Las olas amaron el mar y los kayaks se deslizaron con su música: "chof, chof, fuuz, fuuz". (Es importante que lo pronuncies con la u larga, por eso he puesto dos "úes" en "fuuz").
Nadie decía nada, ni cantaba ni media palabra durante todas las horas. Claro es que palear cansa y no dan ganas de hablar, pero es que esta vez teníamos ganas de guardar silencio. Fue como volar en un sueño, hacia un país imaginario.
A la tarde llegamos a una playa y allí levantamos
nuestro pequeño c
Esta noche la vamos a pasar apretados. Pero tengo la solución porque soy listo \(^_^)/. Voy a abrir todo mi saco para usarlo como manta, así Laika se podrá meter dentro. Se escapa más calor así, pero como somos animales de sangre caliente nuestros cuerpos nos calentarán el uno al otro. Y no hay problemas con las garrapatas, ¡ya he tenido antes! Bueno, son una lata, hay que quitarlas con las pinzas con mucho cuidado, antes de que te enfermes y eso, pero como ya tengo mucha práctica...
Yo haré la primera guardia de la noche, mañana iremos a nuestra casa de invierno, acabando nuestra pequeña aventura. Ya me toca, voy a coger mi fusil. (Que es pequeño, "porque eres pequeño", dice Sargento Mamá).